lunes, 12 de noviembre de 2007

Viaje al fin de la noche, Louis-Ferdinand Céline

Como he hecho con El desierto de los tártaros, y a semejanza de lo visto en Fragmentos de sueños y realidades voy a ir poniendo de vez en cuando textos que me hayan resultado especialmente remarcables de algunos de los libros que he leído. Ahora le toca el turno a Viaje al fin de la noche, de Céline, libro excesivo y virulento, puede que demasiado alargado, pero realmente impactante, y con algunos fragmentos y paisajes geniales, desde los de guerra, pasando por esa especie de viaje al corazón de las tinieblas en África, la estancia en América (para mi gusto la mejor parte)... quizá es en su tramo final, en la vuelta a Francia, donde cojea algo más y el ritmo se pierde. Aún así es un libro muy destacable, de esos que se recuerdan y dejan huella. Ahí van algunos fragmentos que copié en su momento (el que me parecieran destacables a mí no quiere decir que sean de lo mejor ni especialmente profundos ni significativos, por supuesto, que uno tiene sus manías y sus debilidades y se fija más en unas cosas que en otras y, sobre todo, tiene un sentido trágico de la existencia jejeje):

"Filosofar no es sino otra forma de tener miedo y no conduce sino a simulacros cobardes."

"Pero era demasiado tarde para rehacer la juventud. ¡Ya no creía en ella! En seguida te vuelves viejo y de forma irremediable. Lo notas porque has aprendido a amar tu desgracia, a tu pesar. Es la naturaleza, que es más fuerte que tú, y se acabó. Nos ensaya en un género y ya no podemos salir de él. Yo había seguido la dirección de la inquietud. Te tomas en serio tu papel y tu destino poco a poco y luego, cuando te quieres dar cuenta, es demasiado tarde para cambiarlos. Te has vuelto inquieto y así te quedas para siempre."

"Siempre pensaba en otra cosa a la vez, en no perder tiempo ni ternura, como si quisiera guardar todo para algo, no sé qué, magnífico, sublime, pero más adelante, pero no para Molly, no para aquello. Como si la vida fuera a llevarse, a ocultarme, lo que yo quería saber de ella, de la vida en el fondo de las tinieblas, mientras perdiese tiempo abrazando a Molly, y entonces ya no fuera a quedar bastante, fuese a haber perdido todo, a fin de cuentas, por falta de fuerza, la vida fuera a haberme engañado como a todos los demás, la Vida, la auténtica querida de los hombres de verdad."

"Tal vez sea eso lo que buscamos a lo largo de la vida, nada más que eso, la mayor pena posible para llegar a ser uno mismo antes de morir."

"Son otras, las cosas, cuando las vuelves a ver; tienen, parece, más fuerza para penetrar en nuestro interior con mayor tristeza, con mayor profundidad aún, con mayor suavidad que antes, fundirse en esa especie de muerte que se forma en nosotros despacio, con delicadeza, día tras día, cobardemente, ante lo cual cada día nos acostumbramos a defendernos un poco menos que la víspera. De una vez para otra la vemos ablandarse, arrugarse en nosotros mismos, la vida, y las personas y las cosas con ella, que habíamos dejado triviales, preciosas, temibles a veces. El miedo a acabar ha marcado todo eso con sus arrugas mientras corríamos por la ciudad tras el placer o el pan.
Pronto no quedarán sino personas y cosas inofensivas, lastimosas y desarmadas en torno a nuestro pasado, tan sólo errores enmudecidos."

Un libro rabioso y controvertido, tanto como su autor, Céline, acusado de antisemita y colaboracionista con los nazis, pero a la vez altamente expresivo, poético y lleno de vida. Uno de los grandes descubrimientos de este año.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Hace mucho tiempo que tengo ganas de leer algo de Céline. Y, ciertamente "Viaje al fin de la noche" es su obra que más veo nombrar. Muy interesantes los fragmentos seleccionados.

Pesanervios dijo...

La cosa empezó así, que él diría.

Dua se ha leído hace bien poco "El corazón de las tinieblas" de Conrad, y, al parecer, es asombrosamente parecida a la parte africana de "Viaje al fín de la noche" de Céline. Digo "asombrosamente" porque al parecer hay una cantidad ingente de similitudes con ese libro ¿No? Empezando por el título. Llama mucho la atención. ¿No se dejaría influir Céline demasiado por Conrad? ¿Será homenaje?

A ver si me los leo pronto, el de Conrad y éste.

Peter Sinclair dijo...

Pues la verdad no sé muy bien, pero sí que la asociación se hace inmediatamente. No hay otra forma posible de llamar a esa parte del libro como otra especie de viaje al corazón de las tinieblas. Lo que pasa que tengo el libro de Conrad algo olvidado, lo leí hace ya casi 10 años, va tocando una relectura, seguro que ahora lo aprecio más que entonces (y ya me gustó a esa edad, aunque algún tramo se me hizo más pesado). Este y otros de Conrad que tengo pendientes.

Anónimo dijo...

Es una obra realmente interesante, quizá excesiva en el sentido de que se extiende de forma que su lectura puede acabar tornandose un tanto...tortuosa.

Mi parte favorita se encuentra precisamente en el café, en las primeras páginas de la novela.

Knut dijo...

Yo siempre he tenido la sensación de que Celine es de esos autores que te llaman mucho la atencion en la adolescencia pero cuya relectura con los años tiene algo de.. ¿hartible?

Es cierto que tiene un aire al de Conrad sospechosete, pero en mi opinión no hay color. Conrad me parece mejor, no sé pero creo que aguanta diferentes lecturas a lo largo de la vida.

Victoria dijo...

Me sucede que extraigo fragmentos que poseen una significación especial para mí, aunque no necesariamente estoy de acuerdo con lo que dicen. Pero ahora, leyendo los tuyos, me doy cuenta que es necesario leer los libros para sentirlos, no vasta sólo con extractos, y he ahí la importancia de escribirlos y plasmarlos en un blog!, eso nos induce a buscar nuevas lecturas, que tal vez podrían llegar a ser grandes descubrimientos, quién sabe!.

Encuentro tantas semejanzas entre Céline y Knut Hamsun (http://es.wikipedia.org/wiki/Knut_Hamsun)
He aquí algunos fragmentos de "Hambre" (http://plasmados.blogspot.com/2007/10/knut-hamsun-hambre-1890.html), obra que influenció a Kafka y a muchos otros escritores.... así como Céline tuvo una gran influencia en Jean-Paul Sartre, Henry Miller, William S. Burroughs, Kurt Vonnegut...

Gracias! Voy a conseguir cuanto antes "Viaje al fin de la noche"

Saludos!

agnes dijo...

es increible lo ignorante que puedo ser... ni conocía a Céline, ni el libro... ejem...

yo también tengo la costumbre de ir anotando párrafos o frases de lo que leo, aquellas cosas que como a ti, de repente te dicen algo

apuntado queda para futuras lecturas ;)