lunes, 21 de enero de 2013

Revolución

"Nadie se va ahora de esta vida, es la propia vida la que nos es robada. Y si alguno por ventura intenta poner fin a tantas amarguras, cansará inútilmente su mano, puesto que nadie sabe todavía dónde tiene el corazón el pulpo, si es que el pulpo tiene corazón. Rumata se giró y se alejó de allí. Pobre padre Gauk. Sí, el pulpo tiene corazón, y sabemos dónde. Pero esto es lo más horrible, amigo mío. Sabemos dónde lo tiene, pero para arrancárselo tendremos que derramar la sangre de millares de personas aterrorizadas, idiotizadas, cegadas, que no conocen la duda. Estas personas son muchas y tan ignorantes, tan distanciadas, tan irritadas por el eterno trabajo ingrato, y tan humilladas, que son incapaces de elevar el pensamiento por encima de sus pequeñas monedas de cobre. Y por ahora no hay modo de enseñarlas, de unirlas, de dirigirlas, de hacer que se liberen de sí mismas."

"Qué difícil es ser Dios", de Arkadi y Boris Strugatski